nos suceden cosas que son capaces de detener la sucesión del tiempo
o eso nos parece
una costura de instantes que hilamos al compás del sentimiento
pequeños movimientos como los que traman las nubes
esa íntima duración que se desliza a través de la inquietud del espíritu
mientras transcurrimos a través del tiránico e implacable hálito de los relojes
en una realidad que no es más que otro nombre de lo desconocido
pero hay momentos de resonancia para los que nos faltan nombres
no encontramos palabras sino giros y arabescos para lo inaudito
un Azar impertinente que insiste en disolver las certezas
si ese eco de una vieja canción no nos hubiera alcanzado el tiempo nunca se hubiera interrumpido
el cansancio de sobrevivir en una vida sin magia coexiste con la memoria y con el lamento porque lo vivido sea memoria
en una realidad que conmueve y reclama
a través de un silencio que se torna destiempo
entre el goce sensible de las pequeñas cosas
Abril 5 de 2025